| iTunes | iVoox
Hoy la práctica será ser consciente de cómo realizamos la meditación, y observar si solo obtienes esa relajación mental y corporal mediante la atención a un foco de atención y la respiración o si realizas las demás técnicas, pautas, pasos que se considera que debería tener una meditación de atención consciente plena.
En el Podcast «369. No equivoquemos relajarnos en la meditación con estar meditando» hacemos referencia a cómo saber si esa relajación mental es simplemente atención a la respiración, o solo practicamos algunos pasos de la meditación o si dan una serie de factores, pasos, más para que se considere meditación en la atención consciente plena.
Entre ellos está el ser consciente, el no forzar la atención en la respiración bloqueando pensamientos y en gestionar una dispersión, pensamientos y sensaciones, y no tratar de volver a la respiración de forma rápida y sin dar estos pasos.
Empezamos con la práctica
Hoy seremos conscientes de poner intención en evaluar, nuestra práctica de meditación para distinguir si realizamos las pautas necesarias para que se considere, una práctica de meditación “adecuada”, entre comillas.
Comenzamos:
- Escogemos una meditación que ya realicemos o alguna que te propongas para realizar este ejercicio
- Antes de comenzar la meditación ponemos atención en observar conscientemente lo que hacemos y cómo lo hacemos.
- Cuando observamos nuestro foco de atención, como por ejemplo la respiración. Esta es ¿atención relajada?, ¿Concentración? o ¿Consciencia?
- Observamos si damos fe de esa atención, o sea, que somos conscientes de que estamos atentos, o simplemente es una atención o concentración continuada.
- Si es continuada, intentamos verificar, dar fe de que estamos atendiendo a lo que atendemos, se consciente.
- Notamos si ponemos atención en bloquear pensamiento para que no surjan?. Si es así, relajamos esa intención. La dispersiones es normal que ocurran, lo importante es ser consciente de ella.
- Cuando eres consciente o te atiende a tu dispersión, intentas ir rápidamente a atender a tu respiración. Si es así, trata de gestionar esa reacción mental y emocional antes de volver a la respiración.
- Se consciente y observar esos detalles, dedicale el tiempo necesario de forma consciente.
Bueno, como siempre esta es una práctica específica, en este caso para evaluar un poco como hacemos nuestras práctica y con ello poder mejorarlas, si corresponde. Meditar no debe ser ponerse simplemente y listo. Sino que de vez en cuando debemos autoevaluarnos para comprobar cómo vamos, cómo mejorar y si lo estamos haciendo de forma «adecuada».
Como siempre este no deja de ser una práctica más de atención consciente con la que enseñar a tu mente a ser más consciente, a darse cuenta de las cosas, a aprender esa rutina mental que nos ayude a que esta actitud consciente sea una forma natural de nuestra manera de ser.