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Hoy lo que practicaremos será observar esas sensaciones leves que se producen en nuestro día o al menos una cantidad de ellas.
Estas sensaciones aunque sean leves, al final del día pueden haber sumado mucho malestar y por esa constante alimentación de sensaciones dañinas que no gestionamos, podemos generar estados mentales negativos.
También es la puerta de entrada que nos ayuda a poder gestionar con más eficacia esas estados mentales o emocionales fuertes. En el podcast “256. Gestión emocional y mental no solo en las grandes preocupaciones” hablo más ampliamente de todo ello.
Comenzamos con la práctica
Hoy notaremos y seremos consciente de cuando se nos produce alguna sensación o reacciones de poca intensidad para así aprender a aplicar ahí lo que aprendemos con la práctica general de tu meditación, mindfulness o ejercicios de atención consciente plena.
Comenzamos
- 1.- Elegimos un horas del día o elegimos todo el día para notar y prestar atención consciente a esas sensaciones o reacciones mentales de intensidad leve. Si quieres puedes puedes ponerte una cantidad. Notar 5, 10, 15; adapta el numero a ti.
- 2.- Cuando notes esa sensación observate conscientemente al completo.
- 3.- Lleva tu atención consciente a tu cuerpo. ¿Notas esa sensación en alguna parte del cuerpo? o ¿quizás sí es una leve sensación nota como tal como vino se fue? ¿ó quizas la estás bloqueandola?. Nota y se consciente de esa sensación y si aun esta ahi, gestionala, acéptala y no la alimentes.
- 4.- ¿Ha generado alguna tensión corporal? Relajala
- 5.- Notas mentalmente alguna reacción. Observa conscientemente si tu mente trata de reaccionar o ha reaccionado a ella. Solo observala conscientemente y no la alimentes, pero tampoco la bloquees. Solo observa conscientemente.
- 6. Vuelve a lo que estabas haciendo, y ve repitiendo este proceso cada vez que quieras cuando observes estas mínimas sensaciones.
Bueno como siempre este es un ejercicio específico para mejorar. Siempre es bueno practicar ejercicios mindfulness o tu ir poniéndote los tuyos propios adaptados a tus circunstancias.
Lo ideal como siempre es la práctica de la atención consciente a la respiración, pero eso ya cada uno ve si es el momento o no de practicarla.