| iTunes | iVoox
Hoy, lo que realizaremos será un ejercicio de mindfulness para darnos cuenta cuando durante el día nos encontramos en esas sensaciones extrañas, diferentes.
Si queréis saber a qué me refiero con la sensaciones extrañas podéis escuchar el podcast “164. ¿Sensaciones extrañas o diferentes al meditar?, y cómo solucionarla” Donde explico a qué me refiero con ello.
Como en la meditación propia tampoco es muy habitual que se nos de este tipo de sensaciones extrañas, así que lo que realizaremos hoy es algo parecido que quizás se de más en tu dia a dia y podamos utilizarla como práctica de un ejercicio de mindfulness para darnos cuenta de que entramos en una sensación diferente.
En este caso a lo que me refiero es a sentir que nuestra mente se encuentra disfrutando de algo mental y sensorialmente pero que realmente está distraída ya que deberías estar haciendo otra cosa.
No sería una distracción en el caso que conscientemente te hayas puesto a disfrutar de esa ensoñación porque te apetecía. Solo en caso de que en vez de estar atento a lo que hacías, tu mente se dispersó y se encuentra disfrutando o deleitándose en una sensación, sucesso, acción mental en la que te has sumergido y no quieres salir de ella.
Empezamos la práctica.
Hoy realizaremos un ejercicios de mindfulness para darnos cuenta y cómo actuar cuando nuestra mente se introduce mentalmente en disfrutar de algo sensorialmente cuando en realidad lo que deberíamos estar haciendo es estar atento a algo, y simplemente nos hemos distraído.
Los pasos a seguir:
1- Elige un o algunos momentos del día donde crees que esa sensación es más habitual que se te produzca.
2- Pon más intención de ser consciente durante esos momentos, no de forma intensa, sino proponiendo que harás el ejercicio en esos momento.
3- Cuando percibas que tu mente está distraída en esa ensoñación, intenta ser consciente de ello.
4- Cuando seas consciente de que se ha producido, no intente juzgarte por estar haberla tenido, ni siquiera intente bloquearla en ese momento para volver a lo que haces, simplemente acéptala. Como el que ve pasar un desconocido por al lado suya y no lo sigue con la mirada, ni dedica más tiempo a pensar en esa persona.
5- Una vez aceptado ese pensamiento, esa dispersión, simplemente de forma suave vuelve a lo que estabas haciendo. En el caso que te surgiera en la meditación seria todo estos pasos iguales, solo que el de volver a lo que estabas haciendo, seria en tu atención a la respiración.
6- Continua con lo que haces, y no intentes bloquear o eliminar estas distracciones, simplemente permanece consciente en lo que haces y si surgiera la dispersión nuevamente volveríamos al punto número 1.
Recuerda que estos son ejercicios específicos, y a que a unas personas se les dará más a menudo y a otras menos, pero siempre a pesar de ser un ejercicio específico trabajamos la atención consciente, y la gestión emocional y mental. Y eso es importante, porque poco a poco vamos asentando en nosotros de forma inconsciente.