| iTunes | iVoox
Hoy resolveremos la duda de si cuando tengo un resfriado, un constipado o una gripe puedo realizar mi meditación en la atención consciente a la respiración. Y si no fuera así, tengo otras opciones de meditar o dejo de meditar cuando este en esta circunstancia.
Cuando tenemos un resfriado, un constipado o una leve gripe, lo que ocurre normalmente es que nos encontramos con un malestar del cuerpo y en su mayoría tenemos la nariz taponada por las mucosidades, a parte también podemos tener esos estornudos y toses de forma repentina, incluso un dolor de garganta y quizás un dolor de cabeza.
En sí la mayor dificultad de estas circunstancias, aparte de que uno se sienta con el cuerpo indispuesto para hacer meditación, mindfulness o cualquier otra cosa que haces normalmente, pues la mayor incomodez en los ejercicios de atención consciente a la respiración, es precisamente eso mismo la respiración.
Porque al tener la nariz taponada, o semi tapada, y el estar forzando un poco a respirar de forma normal, nos va a impedir un poco el llevar un ritmo normal de respiración y estaremos forzando de forma intencionada el tener la respiración habitualmente que tienes cuando meditas, osea amplia y suave, pero con este resfriado no puedes llegar a tenerla ya que las nariz se encuentra atascada y no te va a dejar obtener esa respiración.
Es más, puede llegar a ocurrir que por intentar forzarla y no conseguir esa respiración natural, puede llegar a ocasionar cierto estrés o malestar por ese continuo forzamiento de la respiración.
Y al final termine más atento a esa incomodez de estar forzando la respiración que en la meditación a la atención consciente. Incluso puede llegar a ocasionar cierto cansancio mental por esa continua pelea con la respiración.
Eso a su vez conlleva una mala experiencia al meditar y quizás si andas empezando en este mundillo eso corra en tu contra ya que pudiera servir como una experiencia incómoda que pueda ayudar a posibilitar una desmotivación.
¿Qué hacemos entonces si quiero meditar y tengo un resfriado?
Si tu práctica normalmente es la de la atención consciente plena a la respiración y en ese resfriado o gripe que has cogido, una de la circunstancias es el taponamiento de la nariz parcial o total, lo que haremos es cambiar nuestro foco de atención.
Entonces, ¿ A dónde cambio mi foco de atención?
En este caso lo que intentaremos es observa nuestro estado mental y ese estado de malestar en el que se encuentra el cuerpo.
Debemos observar cómo nuestro cuerpo se siente con ese resfriado, incluso observar la incomodez en que sentimos cuando tratamos de respirar, y al tener la nariz taponada nos cuesta bastante.
Hay que distinguir quizas aqui una cosa, el malestar del cuerpo es algo habitual, tienes un resfriado o un poco de gripe y ese malestar corporal es una reacción corporal natural del cuerpo para defenderse de ese resfriado.
Osea que observar ese malestar no es observar un estado negativo, sino una sensación del cuerpo. Lo que sí hay que darse cuenta aquí, es cómo reaccionamos a esa sensaciones y como la alimentamos mentalmente, si nos castigamos con ella, diciendo, “no salgo de este resfriado”, “este resfriado no me deja hacer ciertas cosas”, esto ya si seria crear un estado negativo y dejarnos llevar por nuestra dispersión mental.
En si esas sensaciones del resfriado no son ni buenas ni malas, sino una respuesta natural del cuerpo para defenderse de la infección.
Por lo tanto y resumiendo, observamos nuestras sensación o estado mental que nos ha provocado ese resfriado y mantenemos nuestro foco solo en eso, e incluso pudiéramos notar como nuestra mente se siente incomoda por esa respiración forzada.
Un detalle, si tienes tos de forma demasiada continua o estornudo, quizás pudiera escoger un momento para meditar en que suavice ese estado. Si tienes muy poca y se produce mientras meditas, no trates de pararla o retener ese estornudo o tos; simplemente si el cuerpo lo ha pedido hazlo, si lo paras al final estar reteniendo algo natural del cuerpo, simplemente deja que se produzca y observa con atención consciente justamente ese momento que se está produciendo; como se inicia un estornudo y todo el proceso en sí hasta que estornudas o toses. Y después vuelve tu atención a esas sensaciones o estado que tienes provocado por ese resfriado.
No obsesionarse con meditar, siempre puedes dejar de meditar unos días por un gran resfriado, pero si vez que puede ser llevadero puedes practicar la meditación de esta forma que hemos comentado.