| iTunes | iVoox
Hoy explicaremos un poco los pasos a seguir si surgiera una emoción fuerte mientras practicas meditación o mindfulness o si surgiera en tu vida diaria y tuvieras tiempo para realizar esta práctica en ese momento.
Tener una emoción fuerte mientras meditas tampoco es algo habitual, pero según que tipo de meditación estes haciendo, si trabajando con alguna emoción en especial o puramente la atención consciente plena, pues quizas puedan surgir con más o menos posibilidad.
En cualquier caso estos son mis consejos para seguir, bajo mis experiencias y conocimiento.
Estos tipos de consejos que doy no sustituyen ni deben sustituir cualquier tipo de terapia que te haya mandado un profesional, en el caso que tuvieras alguna.
Esta es una práctica complementaria a aquello que ya hagas o simplemente unos consejos para tu práctica de meditación o mindfulness.
Si aun no practica la meditación en el Podcast “103. PRÁCTICA: de “Cómo practicar la atención”” teneis una meditación guiada de 15 minutos que podreis realizar.
Bueno, entonces ¿Cómo actúo cuando me surja una emoción fuerte?
Pues en el momento que te des cuenta de que la tienes, ya sea que haya empezado a surgir o lleves un rato en ella (por cierto, no se juzgue por darte cuenta cuando ya lleve un rato metido en esa emoción, lo importante es ir dándose cuenta).
Pues lo siguiente de darse cuenta, es ser consciente de ella, ser consciente de algo es diferente a darse cuenta, porque a veces nos damos cuenta de las cosas, pero casi de una forma inconsciente. El ser consciente implica ahora tomar una serie de decisiones consciente para actuar sobre algo que nos surge y no simplemente dejar que esa emoción te lleve donde ella quiera y decida por ti.
Entonces, lo siguiente a esta conciencia seria que intentara en la medida de lo posible no modificar nada, aunque puede que en las primeras veces inconscientemente al tratar de observarla puedas modificarla, pero no te preocupes, es parte del proceso, así que intenta simplemente observar..(no aplique un juicio, un bloqueo, ni solape una emociòn con otra emoción, etc)
Intente observar su respiración, observe su cuerpo, sus músculos, nota incluso si tienes nervios producido por esa sensación, dedique el tiempo necesario, para observar todo con detalle y sin prisas, incluso si surge esas prisas por salir de ella, obsérvese también como parte de su reacción a esa emoción.
Observe su mente y que pensamientos intenta surgir y el tipo de sensaciones intenta provocar con esos pensamientos.
Se trata de observar todas tus reacciones a esa emoción pero anclados en la conciencia, para que no nos sumerjamos en esa emoción, sino que la observemos desde la distancia. Desde la conciencia.
No trate de forzar la experiencia o empujarla para tener más o sentirla más fuerte, tampoco intente pararla. Simplemente este en ella, siempre desde la observación consciente. Con esto no estás aumentandola, no estás esquivandola, simplemente observas tus reacciones mentales y corporales frente a un pensamiento que hizo que activara todo esto en tu cuerpo.
Acepta que todo esto surge en ti, no la evites, no intentes pararla ni solaparse con otra cosa. Piensa que estas observando solo la emoción o la sensación en si, ya no tiene porque está anclada a un pensamientos a algo que viste, ahora solo son puntos a observar.
Al final cuando notes que esa reacciones emocionales o mentales han suavizado puedes volver a la atención consciente a la meditación que realizabas, de una forma suave y relajada mental y corporalmente.
Recuerda que observar una emoción no te hace daño, te hace daño en si, como reaccionas inconscientemente después de que surja en ti estos pensamientos y sensaciones. Y lo que estas haciendo en este momento es no reaccionar a ellos, sino observarlo conscientemente.
Así que esta práctica, en realidad, te llevara a aprender a gestionar tus emociones, aprender a no llevarlas más lejos de una reacción corporal o mental. Y según el tipo de intensidad que nos provoque, ya sea un trastorno, una emoción que surge de vez en cuando o algo excepcional, estas se terminan eliminando o se aprenden vivir con ellas, sin que te condicione la vida con reacciones inconsciente y dañinas.
Toda esta práctica te da la facilidad de aprender a gestionar tus emociones, que es al fin y al cabo lo que buscas o buscan la mayoría, para tener un equilibrio mental y emocional mayor. Puedes escuchar o leer si quieres el podcast “91. Equilibrio emocional consciente. Para poder disfrutar más de las cosas” si quiere saber que es.