| iTunes | iVoox
Hoy hablaremos que el desapegarse de algo o alguien no significa ser indiferente a lo que ocurre, no significa no sentir o parar ese sentimiento.
Una de las cosas que solemos repetir es que no hay que apegarse a las cosas más allá de lo habitual, ya sean pensamientos, personas, acciones, etc;.
Que es normal que no nos sintamos bien si algo que nos gusta no se termina haciendo, cuando se esperaba hacerlo y de repente tu respuesta a eso es algo desproporcionada. Y todos más o menos ya sabemos cuando algo se excede de lo normal.
Y si esa reacción es desproporcionada quiere decir que tienes apego a ese suceso, persona, acción, etc. Y es ahí donde habitualmente decimos que debemos aprender a desapegarnos de eso que nos ha causado esa reacción.
He aquí la cuestión, y como todo, hay que tratarla siempre desde el equilibrio.
El desapego no significa que ahora debemos irnos al otro extremo y no sentir nada cuando llegue ese suceso o sobre ese suceso, o que nos resulte indiferente el que suceda algo, estés con alguien, etc.
No se trata ahora de dejar de sentir o parar esos pensamientos para no sentir nada, para que cuando algo no suceda estemos como si no hubiera pasado nada. Estemos con esa actitud indiferente a todo y que no nos importa nada las cosas que ocurran.
Es bueno tener cosas que te guste hacer, realizar, etc. Y que si no puedes hacerlas pues también es normal que te sientas algo decepcionado, molesto, con una sensación de “me gustaría haberlo hecho pero no se ha podido”. Hasta ahí debemos entender que esto es lo habitual y lo que realmente debemos sentir.
Otra cosa es que nuestra reacción a no poder hacerlo sea ya desproporcionada, sentirnos molesto todo el día, creando una actitud reactiva negativa a cualquier cosa porque nos estamos sintiendo mal, etc. En el podcast ” 355. El APEGO no es tanto lo que hagas, sino cómo te tomes el NO poder HACERLO. ” Hablamos un poco más ampliamente de este aspecto.
No es la frase: “para no desilusionarme no me ilusiono”
A veces, todo esto se entiende mejor con la frase “para no desilusionarme no me ilusiono”. O sea, para no apegarnos a algo y nos sintamos mal al ver que no ocurre pues directamente nos “desapegamos” totalmente y así no nos provocamos sentirnos mal cuando eso no ocurra.
Y esto suele ocurrir con personas, con viajes, con planes que tenemos en mente, cuando va llegando un suceso que nos suele gustar, cuando empezamos a hacernos expectativas sobre algo, etc.
Algunas personas, en estos casos, para no desilusionarse por si no sucede lo esperado lo que hacen es “desapegarse” de mala manera por llamarlo así. En estos casos más bien utilizan el parar todo tipo de pensamiento sobre ese suceso y que te puedan generar una sensación.
Recuerdo en estos momentos que el bloqueo de esas sensaciones o a esos pensamientos no es desapegarse, aunque pareciera que es lo mismo ya que no te “ilusionas” con hacer algo o estar con alguien.
La indiferencia es más un acto de bloqueo mental y emocional, terminamos teniendo falta de sensibilidad hacia lo que ocurre y hacia otras personas. Y claro está esa indiferencia no es buena.
Aunque se que en ocasiones se puede llegar a pensar “mejor eso que pasarlo mal”, pero en este caso aquí hemos decidido trabajarnos y precisamente esa actuación no sería la mejor opción
Y como más o menos habrá quedado claro, el desapego en la meditación no significa que todo nos da igual, que nos sentimos indiferente ocurra lo que ocurra, el desapego en la meditación es si algo que te ocurre es bueno o malo respondemos sintiéndolo, pero no lo llevamos a una reacción desproporcionada o dejamos que esa sensación secuestre nuestra forma de ser o actuar
Inconveniente del desapego entendido como Bloqueo emocional y mental
1.- Uno de los inconvenientes aquí es que al bloquear esos pensamientos y sensaciones estos seguirán en nuestra mente. Simplemente que ponemos un muro entre medio para que no pase, pero que es probable que en algún momento salga y termine haciéndonos más daño aún del esperado; ya que vendrá con más fuerza e intensidad, y que no solo sale de esa sensación correspondiente a ese momento que tenemos en mente sino que viene toda esa sensación y pensamientos que has ido acumulando por lo que llega como un torrente de agua, rompiendo todo a su paso.
2.- Otro de los inconveniente es que empezamos a ser “insensibles“, nos tomamos las cosas con una actitud indiferente, “ah pues si no ocurre pues nada”, “ah!, pues si esto no funciona a mi me da igual”, etc etc.
Entonces…
¿Cómo actuamos para desapegarnos de forma correcta?
Yo hablaré desde mi opinión y mi experiencia.
Claro está, el primer ejercicio para desapegarnos de algo, es ser consciente que sentimos ese apego, y por lo tanto nos hemos evaluado y hemos encontrado una reacción desproporcionada tanto mental o emocional hacia algo o alguien.
Entiendo que ya cada uno tiene planteado donde más o menos se siente demasiado apegado a algo, situación o persona, y que lo que trataremos es desapegarnos, en la medida de lo posible de eso.
Y esto no significa que dejemos de sentir o actuemos de forma indiferente, sino que, sentiremos lo que debemos sentir ante esa situación pero que eso no nos hará sentirnos que esa situación no está condicionando el día, que nuestra reacción ante lo que ocurrirá o dejara de ocurrir, nos hace sentir de forma desproporcionada a lo que se consideraría normal.
Como humano debemos de sentir, es es lo habitual, solo que debemos tratar de que esos sentimiento no nos condicionen tanto o nos generen aún más preocupación de lo que debería.
1.-Cómo actuar ante pensamientos repetitivos:
1.- 1.1.-¿Qué puede ocurrir?
- Observemos nuestra reacción mental, ¿que está haciendo?, a veces suele estar “r que r” con lo mismo e incluso intentamos pararlo pero “uff” otra vez, no tardamos ni 2 segundos en que aparezca.
- O quizás, mentalmente esa inquietud no deja que la mente se centre en nada, y solo busques esos pensamiento relacionado con esa circunstancia.
- También habrá una sensación corporal, que tendremos que gestionar que comentaremos más abajo.
1.2.-¿Cómo actuamos?
En esos casos debemos aprender a observar nuestro pensamiento de forma consciente y continuada.
Observamos esos pensamientos de forma consciente y notaremos que casi de forma automáticamente se dispersa, pero, a lo mejor, podemos notar que la mente queda como “inquieta”, esperando que perdamos esa atención consciente para soltar otra vez más pensamientos.
Si es así, después de observar ese pensamiento, intentamos ser consciente de esa inquietud mental y trata de relajarla mentalmente. Esto debería ser como un ejercicio de algunos minutos para que la mente empiece a aprender ese proceso y que se calmara un poco. Aunque sería conveniente seguir repitiendolo más veces (el jueves pondremos este ejercicio)
2.-Cómo actuar ante sensaciones duradera:
Otra opción es que no esté en esos momento pensando, pero esa sensación corporal está ahí, te acompañe durante todo el día.
En lo explicado anteriormente esos pensamientos e inquietud mental seguramente vienen con sensaciones que la gestionaremos como vamos a comentar, pero en esto de “sensación duradera” me refiero cuando el cuerpo lo tenemos “raro” porque esa sensación corporal está ahí, pensemos o no pensemos en eso a lo que le tenemos apego.
1.-Pensamiento con sensación:
En la sensación que viene acompañada de esos pensamientos debemos gestionarla en el momento que somos consciente de esos pensamientos y debemos observar esa sensación y tratar de suavizar esa reacción activa de nuestro sistema nervioso, relajando músculos de su alrededor y relajando esa sensación o suavizandola.
2.-Sensación duradera (estado de ánimo)
En la “sensación duradera” está, lo que hace a veces, es condicionarnos a un estado de ánimo específico, por lo que ese trabajo de gestión emocional que hemos comentado antes debemos hacerlo durante todo el día. Debemos poner más intención a estar más atento a esa sensación y gestionarla una y otra vez.
Para terminar quiero aclarar que el apego o desapego tiene libros enteros escritos sobre ello. Entendamos esto que comento como pequeñas aportaciones a este conocimiento o esta práctica, como complemento si ya sabes todo esto o como introducción, resumen u opinión si estas empezando. Aún asi para cualquier duda siempre puedes consultarmela en pcardenas.com/contatar.
Resumen
- El desapego no es ser indiferente a lo que ocurre, sino sentirlo pero sin reaccionar desproporcionadamente, ni tampoco es dejar de sentir cosas por algo que te sucede o vaya a suceder.
- La indiferencia es bloquear los pensamientos y emociones para tratar de no sentir nada. Pero al final todo esto queda en nuestra mente, quieras o no, y seguramente termine saliendo más temprano que tarde y con mayor intensidad y fuerza.
- Desapego es aprender a sentir lo que uno tiene que sentir en cada momento pero sin que esa sensación provoque en nosotros una reacción desproporcionada. Aunque sabemos que todo esto no es perfecto.
- Para aprender a desapegarse hay que trabajar la gestión mental y emocional, aprender a ser consciente de ella, relajarlas, suavizarlas y aceptarlas.