| iTunes | iVoox
Hoy hablaremos de cómo gestionar esas interrupciones de cambio de tarea inesperado para comenzar otra, en el trabajo, que nos hace ser menos productivo o que la mente no puede trabajar con cierta calma mental o plenamente en la otra tarea nueva a realizar. También haremos relación o pasaremos la solución de ese estudio a nuestro quehaceres del día a día
Todo esto fue demostrado en un estudio que vamos a comentar.
Igualmente vale para cualquier interrupción que se de en el día mientras realizas algo, aquí hablamos de cuando algo nos interrumpe lo que estamos haciendo para hacer una tarea distinta y debemos volver después, más tarde o en otro momento a esa misma tarea porque este fue como se realizó el experimento.
Una aclaración por si acaso, en este caso no nos referimos a realizar dos cosas a la vez, donde vamos cambiando de una tarea a otra, a lo que nos referimos con esto es cuando estamos centrado en una tarea y de momento y de forma inesperada tenemos que cambiar a una tarea distinta.
De que vamos a hablar en este podcast
En este podcast hablaremos de lo que ocurre en nuestra mente en esa interrupción, del estudio que se realizó para comprobar qué ocurría cuando comenzamos una nueva tarea habiéndose interrumpido una anteriormente en la que luego debemos volver a reanudar y de cómo podemos hacer que esa interrupción nos afecte los menos posible y así poder estar plenamente centrado, con más calma mental, en esa nueva tarea.
Pasaremos los resultados a cómo aplicarlo a nuestro día o a lo que nos ocurre en nuestro día respecto a los pensamientos, sensaciones, acciones, inquietudes, etc.
No entendamos solo este beneficio a nivel productivo, sino a nivel preocupación mental, calma mental; lo que quiere decir no alimentar un estado de ánimo de malestar y favorecer una mente más calmada que es igual a posibilitar un mejor estado de ánimo.
Que se hizo y que demostró el estudio
Intro:
El análisis que hizo Harvard Business Review demuestra que ser interrumpido en una tarea que debemos proseguir en otro momento crea un residuo mental de atención que no deja que la mente se centre por completo en la tarea nueva.
O sea, hablando en términos Mindfulness, no hay una mente calmada para empezar una nueva tarea a pleno rendimiento.
El estudio:
El estudio fue dividir a los participantes en dos grupos de personas. El primero se les interrumpió para hacer otra tarea y le dijeron que después tendrían mucho tiempo para terminar esa tarea interrumpida. Y al otro grupo le dijeron que no tendría después mucho tiempo para realizar la tarea interrumpida
Luego se les pedía que basada en la información de esa segunda tarea tomarán una serie de decisiones, y el resultado fue que los que tenían presión de tiempo, el segundo grupo, se dio el caso de que tuvieron menos probabilidades de identificar la solución más óptima de esa segunda tarea.
El resultado:
El resultado de este experimento fue que a los que tenían esa presión de tiempo, poco tiempo para realizar la tarea que le interrumpieron, tuvieron más cantidad de residuo de atención, o sea, la mente aun esta pensando en la primera tarea, no la quiere dejar ir. Aunque fuera de manera subconsciente.
En el trabajo suelo tener casi siempre el tiempo justo.
Sabemos también que, sobre todo, si se trata de trabajo eso de tener mucho tiempo para la otra tarea a veces no es posible, por no decir la mayoría de las veces.
Entonces, ¿estamos condenados a llevarnos siempre ese residuo de atención? o ¿se puede solucionar?
Entonces respecto a esas pregunta realizaron un segundo estudio en el comprobaron unas opciones para gestionar este residuo de atención, o sea intentar gestionar o no tener esa mente preocupada, inquieta o no tranquila.
Segundo estudio (plan de reanudación)
Igualmente hicieron dos grupos para este experimento. Un grupo fue interrumpido en la tarea A y de inmediato empezaron la tarea B. El segundo grupo se les interrumpió igualmente en la tarea pero le dieron unos instantes para que hicieran un “plan de reanudación”, o sea, anotar donde se habían quedado en su tarea A, como querían empezar cuando lo reanuden y así la mente podía enfocarse más rápidamente cuando volvieran a la primera tarea al saber que tenían que hacer exactamente.
Este experimento demostró que los que hicieron ese plan de acción, este “plan de reanudación” sufrieron mucho menos ese residuo de atención. Se demostró que las probabilidades de una respuesta más óptima era de un 79%
Bueno entonces..al final lo importante es ¿Qué conclusiones sacamos con esto? ¿y cómo podemos aplicarlo a nosotros?
Vayamos por parte respondiendo todo esto.
Lo que ocurre cuando interrumpimos una tarea, el inconvenientes
Al comenzar una nueva tarea tras una interrupción de la anterior, que se ha dejado sin finalizar, nuestra mente no podrá centrarse completamente en lo nuevo que vayamos a hacer ya que no podemos salir mentalmente o por completo de lo que acabamos de dejar de hacer.
Diríamos que es como una inquietud de haber dejado una tarea sin terminar y en curso, y que sabemos que tenemos que hacer, pero no queremos olvidarla para intentar recordar por dónde íbamos y que la vuelta fuera más suave.
Porque ocurre.
A nuestra mente le cuesta mucho dejar algo sin acabar en nuestra mente, por eso se genera ese residuo de atención.
Cuando no recuerdas algo pero sabes que lo sabes, y empiezas a hablar de otra cosa y de repente “chas” te viene ese nombre. La mente seguía trabajando en eso aunque tu no fueras consciente de ello.
Es como las preocupaciones, si no aprendemos a aceptarla, no darle tanta importancia, las mantenemos ahí en nuestra mente. La mente le seguirá dando vueltas a lo mismo, buscando una respuesta o alimentándose de alguna manera.
¿Cómo solucionarlo todo esto?
Ya hemos visto que frente a una tarea que se interrumpe lo mejor es hacer ese plan de acción, ese plan de reanudación. Ya que así la mente se siente más tranquila, más calmada, y no está dando vuelta a esa preocupación de cómo volver cuando tengas que reanudar la vuelta a la tarea interrumpida.
El “plan de reanudación” más Mindfulness
En este caso el Mindfulness puede ayudar a ese “plan de reanudación”, incluso aceptando o gestionando esa preocupación mental cuando esta aparezca en tu mente o tomarte un minuto antes de empezar la siguiente tarea para gestionar esas preocupaciones esas inquietudes. Aumentando tus posibilidades de ir con una mente más calmada a la siguiente tarea.
Trasladando este experimento a nuestro quehaceres del día a día
Esto demuestra al fin y al cabo que cuando dejamos una cosa a media y tratamos de pasara a otra, ya sea para no pensar en ella, para no darle más vuelta, etc; si no hay un plan de acción con respecto a esa tarea, a esa preocupación, a esos pensamiento, a esas inquietudes, a esas acciones, etc.; pues en nuestra mente siempre va a quedar ese residuo de atención que va a estar en aquello que no hemos solucionado o dejado a medias.
O sea, siendo más claro, si algo te preocupa e intenta estar en otra cosa para no pensar en ello, en tu mente siempre quedara ese residuo de atención que esta consumiendo tu atención en eso que te preocupa, siendo más claro aún, estarás alimentandola subconscientemente, para que siga la preocupación, aunque tu no te percates de ello.
La mente no puede pasar de “preocupación” a ” no preocupación” como el que pulsa un botón, ese paso es una transformación, es un camino que ha de recorrer.
En el experimento anterior realizaban eso que llamaban un “plan de reanudación”, porque así la mente se quedaba más calmada, tranquila, para pasar a su segunda tarea, y en la vida diaria con los problemas necesitamos ese plan de acción igualmente, en este caso es el gestionar esa preocupación, pensamiento, inquietudes, sensaciones. etc.; para que así la mente, pase a la siguiente tarea, acción o lo que quieras que quisieras hacer en ese momento sin tener que llevar esa carga mental, esa preocupación o inquietud. Y que no se alimente con fuerza en tu mente de forma subconsciente.
Que beneficios nos proporciona el Mindfulness en este caso
1.- El Mindfulness, la meditación, lo que nos proporciona son dos cosas importante, el darnos cuenta cuando ocurre, para así saber cuando utilizar ese plan de acción, por llamarlo de algún modo.
2.-Y lo segundo el aprender a gestionarlo, para que lo siguiente que queramos hacer vaya con una mente más calmada, y con una mente que no sigue dándole vueltas a aquello que te preocupaba o intentas evitar pensar. Aunque tu no te percate o crea que no lo estas haciendo.