| iTunes | iVoox
Hoy hablaremos de porque ponemos esas excusas de no tengo tiempo e intentaremos ayudarte a que des por fin ese paso de practicar mindfulness.
Entonces, «¿no tienes tiempo?» En serio, «y para escuchar este podcast si, «jajaja, no enserio, lo primero antes de empezar es que se puede aprovechar cualquier cosa para dar los primeros pasos en esto de la meditación, de hecho puedes convertir este podcast una práctica y escucharlo con consciencia, ser consciente de lo que voy comunicando y cuando tu mente intente distraerse, simplemente no dejarse llevar por ella, ni luchar contra ella, simplemente volver a seguir escuchando de una forma atenta y sostenida.
Imagino que este podcast, quizás no interese tanto al que ya lleva tiempo escuchándome porque seguramente alguna práctica habrá realizado, sino, quizás le sirva más de apoyo a la personas que anden un poco buscando convencerse de que quiere meditar pero sabe que ella misma está utilizando la excusa de no tener tiempo, pero que en verdad si quiere dedicarle tiempo a hacerla, solo que le falta ese último empujón que le facilite el comenzar con esta técnicas de mindfulness.
Y espero que este pequeño podcast le aporte ese granito de arena para comenzar.
En la práctica de la atención consciente plena, eso de no tener tiempo es, a veces, una de las excusas más fáciles para no empezar, para no dar el paso de ponernos, ya sea, por falta de motivación, por que no estamos convencido del todo de si nos funcionara esto, de que si no sabemos exactamente lo que hay que hacer, total. Que utilizamos una excusa sencilla, que es, que no tengo tiempo.
Otra veces, quizás, confundimos el no tener tiempo, con el no poner ese esfuerzo, o simplemente no querer parar un poco de lo que haces, o lo que no haces y aplicar estas técnicas de mindfulness, porque ya has oído hablar de ella algo o incluso mucho y sabes lo que se debe hacer, pero no te llegas a poner a ello.
Eso es algo que también suele pasar y en esas ocasiones una de las excusas que seguimos poniendo es, que no disponemos de tiempo.
Estas prácticas no tienen nada de obligatoriedad, si uno no quiere ponerse por lo que sea, es simplemente más fácil decirse que no le interesa por ahora. Es más sencillo para tu mente, incluso te ayudará a no tener «esa charla interna» de me debería poner, diciendote “busca tiempo, pero es que no lo tengo”, “ es que ahora no puedo por esto y por lo otro”. En ocasiones, es más sencillo e incluso más sano para tu mente ese «en estos momento no me pondré por que….” y lo que sea.
Pero si ves que tienes posibilidades de ponerte, de que te falta un empujoncito para iniciarte en estas prácticas seria bueno hacerte al menos un par de preguntas :
- ¿Realmente me quiero poner?, pero en serio, ¿realmente me quiero poner?,
- Y la otra que le sigue que es igual de importante ¿Por que, para que quiero ponerme?
Estas dos preguntas no son respuestas que se respondan en el tiempo en que las he preguntado, que lo mismo lo habremos hecho, me refiero que te hagas estas preguntas a ti mismo y que le dediques una buena reflexión.
Seguramente este paso pueda posibilitar el que pongas más intención en encontrar tiempo para ponerte, o que ese «convencimiento» hasta cierto punto, de esas respuestas a las preguntas anteriores te ayude a encontrar la forma de incluir la atención consciente plena dentro de tu día a día.
Otras cosas a tener en cuenta cuando utilizamos eso de que «no tengo tiempo», pero sin embargo, estas en que si quiero pero no puedo, o eso te dice tu mente, en ese caso no debes pensar en iniciarte en la meditación yendo a clases de una hora o de media hora en un lugar predeterminado, que si se puede mejor, y que si es con una persona cualificada que nos guíe también mejor, pero a veces esto nos impide el comenzar.
Porque empezamos a darle vuelta y mirar el tiempo que debemos dedicar a la práctica de mindfulness, que si tengo que ir a ese lugar, y después una hora y luego volver a mi casa, total, me se va mucho tiempo, y lo mismo eso no se adapta a mi horario, total que vuelve a salir la excusa que no tengo tiempo, y si a veces no hay tiempo, pero ya me entendeis.
Entonces si quieres comenzar en esto de las prácticas de mindfulness se pueden comenzar con simples ejercicios de 1 respiración, ejercicios de 1 minutos de consciencia, ejercicios de mindfulness en cualquier acción del día, (poner enlaces a las practica), o aprovechar que estás en algún lugar esperando algo y ahí realizas la práctica; total que siempre tendremos donde aplicarlo si realmente queremos ponernos. No necesitamos un tiempo extra para hacer mindfulness sino que aprovechamos lo que ya tenemos.
Eso sí, ya sabemos que en cualquier disciplina lo difícil es coger el hábito, o sea, el comenzar las primeras veces y hacer que lo hagamos de manera continua, una vez tienes eso, es un gran paso, luego ya puedes ir avanzando poco a poco.
Así que, si no tienes tiempo, utilizas las prácticas que hemos comentado anteriormente, comienza con poco, con lo que te sientes cómodo y que tu mente no pueda poner excusa de que no tengo tiempo.
A ver, no voy a tratar de vender humo, con lo que he comentado no saldrán ahora los ejercicios solos, porque, eso si, tu poquito de voluntad para empezar siempre va a requerir, pero cuanto menos excusas se encuentre tu mente para no hacerlo resultará más fácil dar ese pasito para comenzar.Así que espero haber ayudado, a esas personas, a dar ese pasito para tener su comienzo dentro de la práctica de la atención consciente plena, meditación o mindfulness. O al menos, haber aportado mi granito de arena, por si en otro momento vuelves a escuchar a otra persona hablar sobre este tema y su granito es el detonante para que comience.