| iTunes | iVoox
Hoy hablaremos de esa relajación mental y corporal que puede posibilitar el prestar atención a un solo foco de atención, a la respiración, y que esta especie de mejora en nuestra calma mental la confundamos con meditación.
Quiero hacer entender en este caso, no la diferencia entre ejercicios de relajación o meditación, sino que, si solo hacemos ciertas pautas de meditación, puede darse el caso de que nos sintamos relajados mental y corporalmente pero que al faltar otros pasos de esta técnica, esos beneficios de la meditación no los obtengamos de manera general en nuestra vida diaria.
Antes de nada decir que si hacemos estos ejercicios y nos relajan mental y corporalmente, es una buena opción seguir haciéndolos, si lo que buscamos en esos momento es estar asi.
Ahora, si lo que buscamos es hacer meditación, por lo tanto, aprender meditación, y obtener esos beneficios demostrado científicamente, y que estas prácticas nos sirvan para después aplicar esa «gestión emocional y mental» y esa consciencia de” darnos cuenta» en nuestra vida diaria, pues debemos comprobar que se den una serie de factores.
Lo comento, porque a veces puede pasar que nos sintamos que no podemos aplicar en el día a día estas técnicas y esto podría ocurrir entre otras muchas opciones, que realmente no estemos realizandola de forma «adecuada», siempre entre comilla lo de «adecuada». Y por esa circunstancia no nos esté dando resultado más allá de sentirte un poco relajado mentalmente en esa práctica, en esa «meditación», entre comillas.
Hoy toca auto-evaluarnos un poco, que siempre debería formar parte siempre de la meditación y creo que de cualquier cosa que estemos aprendiendo. O sea, ver cómo lo estamos haciendo para comprobar si vamos bien, si lo realizamos de forma adecuada o si podemos mejorarlo.
Lo que puede estar ocurriendo:
Lo que puede estar pasando es que nos sintamos más relajados corporal y mentalmente y esto puede dar a confusión con estar realizando una práctica de meditación en la atención consciente plena. Porque parece que estamos obteniendo los mismos beneficios, o están sucediendo las mismas consecuencias.
Una de las cosas que suele pasar es que antes de empezar, a veces, se hace una relajación corporal, y luego centramos nuestra atención en un punto, en este caso suele ser la respiración. Y el solo hecho de centrar nuestra atención en algo «de forma relajada», sin estrés, es una forma de tranquilizar nuestra mente, de relajarla. Esto es algo «bienmente» demostrado.
Luego el hecho de utilizar la respiración como centro de nuestra atención, hace que esa respiración tienda a ser más amplia, a veces hasta más profunda. Y este es un factor importante que posibilita que una mente tienda a calmarse. Igualmente es algo «bienmente” demostrado.
Con esto ya podemos posibilitar en nosotros una sensación de calma mental y corporal. Y si a esto le sumamos que, a veces, según cuando realicemos la meditación, pues podemos venir de ese estrés del día a día o de esas preocupaciones mentales o de ese estar haciendo todo a la ligera, pues la comparación de cómo estábamos antes de meditar y cómo estamos meditando puede aumentar esa sensación de calma mental y corporal.
En lo definido hasta ahora solo estaríamos utilizando una atención relajada en un solo foco de atención, en muchos casos la respiración. Y ya de hecho podríamos obtener o no, esos beneficios de relajación mental y corporal en esos momento de la práctica. Pero en este caso solo se suele dar esta posibilidad de beneficio solo cuando lo práctica.
Y recuerdo que esos beneficios son buenos si buscas exactamente eso. Ahora si buscamos meditar y por lo tanto para ello aprender a meditar debemos comprobar otros factores que se deben de estar dando.
¿Qué factores debe tener además la meditación?
Comentaré los más importantes. Aunque se que muchos probablemente ya lo estaréis realizando de una forma «adecuada», pero para los nuevos o para recordatorio de los que lleven un tiempo, comentaré otros aspecto que se deberían estar dando para comprobar que estamos realizando una meditación y no una técnica de relajación mental y corporal.
LOS FACTORES:
- Ser consciente: Uno de los básico a comprobar es ser consciente, es obvio, pero a veces lo confundimos con una atención relajada o con un exceso de concentración, no se si de aquí sacar otro podcast para saber distinguirlo en una meditación, creo que el siguiente será la explicación de como saber distinguirlo en nuestras prácticas.
- Forzar a estar en la respiración: Otras de las cosas que podemos estar haciendo es forzarnos a estar en la respiración, estando con una actitud o intención de bloquear cualquier distracción. Cosa que no debería producirse en la meditación, ya esa atención debería ser simplemente consciente y si tiene que surgir una distracción debe salir, lo importante es el ser consciente, el aprender a darnos cuenta cuando surge.
- Gestión mental y emocional: Otra pudiera ser, es el que si nos demos cuenta de esa distracción, incluso si somos consciente de ella, no debemos tratar de pasar a la respiración sin haber gestionado esos pensamientos ni esas sensaciones producidas por esa dispersión.
Creo que estos 3 factores son importantes, aunque hay otros más si se profundiza, pero estos deben ser claves en una práctica de meditación para saber distinguirla de un simple ejercicio de relajación mental y corporal. Que recuerdo que son buenos también, pero en este caso los datos que proporcionó o la intención de estas explicaciones son para intentar facilitar el que aprendamos meditación realizandola de una forma «adecuada», entre comillas.
Siempre ese «adecuada» está basada en el conjunto de mi opinión, mi experiencia, mis conocimiento y en lo que dice la ciencia al respecto.
Resumen:
- La práctica que realicemos puede producir una relajación mental y corporal.
- Esa consecuencia puede producirse simplemente por atender a un solo foco de atención y a la respiración; que son dos circunstancias que posibilita una mente más calmada.
- Para evaluar si haces una Meditación «adecuada«, sería bueno comprobar al menos 3 factores importantes.
- Ser consciente, es obvio pero a veces solo podemos estar realizando atención relajada o concentración
- No forzarnos a solo estar en la respiración sin dejar que entre nada más en nuestra mente
Gestionar esas dispersiones mentales y no tratar de volver rápidamente a la respiración saltándonos este paso.